Erase una vez…así empiezan todos los cuentos, pero este no es uno de ellos, es una realidad. No sé cómo, ni cuándo, en que momento me llegó tan dentro y me caló tan hondo, si en un compás del dos por cuatro, en una fusa escapada de un gallo ciego, o en el primer abrazo de su música envolvente.
El tango es como un sueño, te arropa, te mece en calesita, te atrapa de tal forma, que no quieres despertar, no entiende de colores, ni de edades, ni de razas, no importa si estas sólo, no importa lo que hagas…a todos nos iguala, nunca un lenguaje fue tan fácil, sobran las palabras, escuchas, abrazas, interpretas y te deslizas, te dejas llevar por la tarima, un arrastre, un ocho, una caída,¡ si fuese tan sencillo en nuestra vida!, con un sólo abrazo bastaría.
El tango es más que eso, el tango son amigos, risas, complicidad, pasión, como una gran familia, es una conjunción de sentimientos, como si de la vía láctea se tratara, nosotros los planetas girando alrededor, al compás de su música, fundidos en un abrazo, en un sólo corazón, cuyo latido te marcan los compases, ahora un Pugliesse, Canaro que no falte, y desde el alma…te llega el valsecito, ése en el que parece que despliegas las alas y vuelas y te elevas por la sala, y piensas que no acabe, que me siento tan a gusto que no quiero despertarme, o ese Tango Negro que como un resorte, hace que todos se levanten, como si les dieran cuerda porque su música les invade.
¡El tango es tantas cosas!...como en los tarritos de perfume, que aunque se vacíen siempre queda el olor, el tango es la esencia, eso que perdura en el ambiente, aún cuando la música no suena.
El tango somos todos… y tú, que compartes conmigo esa afición, un único ABRAZO UNIVERSAL, de sentimientos y de ilusión.
¡Qué suerte Tango de haberte conocido!
(Campanilla) / Campanita de Barzaires.
PUBLICADO EN LA REVISTA DE VERATANGO Nº3, MAYO 2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario