domingo, 15 de mayo de 2011

EL ETERNO CLUB DEL MATE


Foto: Realizada por Campanita de Barzaires - MI MATE.

Hace tiempo Aleksander Nagi me mando este escrito, lo tenía en su blog LA CANCION DE LA FLOR, Aleksander es una de esas personas que escribe desde la sensibilidad de su corazón, tanto sus poemas, como sus escritos, llevan una carga importante de lo que siente y nos hace sentir, recuerdo con inmenso cariño el año 2007, cuando un grupito de gente, empezábamos a conocernos, y formábamos una pequeña gran familia.

Algunos se alejaron, vinieron otros nuevos, pero la gente que impregnó mi corazón, se quedó ahí para siempre, Aleksander fue uno de ellos, y quiero darle las gracias por permitirme publicar su escrito. Nada mejor que retomar el blog tomando un mate... ¿tomamos un mate?



Jueves 19 de Julio de 2007

…El Eterno Club del Mate

Creo que sí, ser “matero” es algo muy especial…Me parece que es un
Estilo de vida que no es dado para todas las personas…El club de los
Materos, para mí, es como una hermandad…Es un círculo energético
En el cual compartes y siente que estás mas cerca de los que te
Rodean en este lapso de tiempo. Las horas pasan, las charlas fluyen, las
Emociones crecen y las distancias se vuelven más cortas…
El mate me hace recordad la juventud cerca de las colinas del monte
Hermon (Haramun en árabe)…


En los agostos y septiembres (Aab y Aylul en árabe) de todos los
Años, son los meses de las cosechas y las preparaciones de los
Productos que se consumen durante el invierno: el trigo, las
mermeladas, El vinagre, los productos lácteos, quesos y el
“labne” (cuajada libanesa), los frutos y verduras secas y una gama de
Delicias hechas por las tradiciones milenarias del conocimiento…

Pero para mi había un día muy especial, este era el día de la
Preparación del queso. Este empezaba a las ocho horas de la noche,
Cuando los pastores entregaban la leche de cabra y oveja recién
Ordeñada, vertían estos en un recipiente tipo caldero de cobre. La
Abuela revolvía esta leche con un cuajo hecho artesanalmente
Específico de la zona, tapaba el caldero con una tela delgada y nos
Mandaba a dormir…


El sueño para mi era una idea muy remota para lograr…Las emociones
De un joven de 11 años son de mucha tenacidad…Para mi ver el
Proceso y estar al lado de mi abuela haciendo el queso era un
Privilegio. Ayudar en lo que se pueda, aprender el arte de la
Elaboración manual es también un sueño que no lo negociaba con la
Almohada y tampoco con la resistencia debilitada del cuerpo después
De un largo día de juegos…

A las cuatro y media de la mañana sentía los pasos de la mujer más
Especial de este universo. Una mujer de lucha permanente con la
Firmeza del granito, ponía las bandejas que recibían los manojos de
Queso exprimido entre sus dedos a la manera artesanal, los ponía en
Filas medios acostados para que el proceso del desagüe siguiera su
Camino…
Mi persona se encargaba de hacerle el mate, le daba tomar
Manteniéndolo en mi mano y por supuesto recibiendo las instrucciones
Para hacerlo cada vez mejor…Le gustaba su mate amargo, caliente y
En abundancia. Por lo tanto, ella escogía los totumos que sembraba, los
Secaba, los limpiaba y al final los tostaba por fuera. Después de
Echarles azúcar caramelizado y su humo los curaban por dentro, dejando
Un sabor y una aroma inconfundible e inolvidable…

Mi abuela, esta luz que todos los días veo desvanecer (que desde hace
15 años, 3 meses y 19 días no la veo, ni cuento con sus abrazos ni con
Sus besos), me dejó este arte, el arte de tomar, hacer, compartir y
Disfrutar el mate…

Y para terminar aprovecho para invitarlos a un mate en honor de todos
Sus tomadores y en honor de sus inventores. Que viva el club del mate,
Que viva la tierra que lo produce y larga vida para sus filas de honor de
Admiradores y seguidores…
Salud…
Aleksander

SILENCIAMOS DEEZER:


El mate no es una bebida. Bueno, sí. Es un líquido y entra por la boca. Pero no es una bebida.
En este país nadie toma mate porque tenga sed. Es más bien una costumbre, como rascarse.
El mate es exactamente lo contrario que la televisión: te hace conversar si estás con alguien, y te hace pensar cuando estás solo.

Cuando llega alguien a tu casa la primera frase es "hola" y la segunda "¿unos mates?".
Esto pasa en todas las casas. En la de los ricos y en la de los pobres.
Pasa entre mujeres charlatanas y chismosas, y pasa entre hombres serios o inmaduros. Pasa entre los viejos de un geriátrico y entre los adolescentes mientras estudian.

Es lo único que comparten los padres y los hijos sin discutir ni echarse en cara.
Peronistas y radicales ceban mate sin preguntar. En verano y en invierno.
Es lo único en lo que nos parecemos las víctimas y los verdugos; los buenos y los malos.

Cuando tenés un hijo, le empezás a dar mate cuando te pide. Se lo das tibiecito, con mucha azúcar, y se sienten grandes.

Sentís un orgullo enorme cuando un esquenuncito de tu sangre empieza a chupar mate. Se te sale el corazón del cuerpo.

Después ellos, con los años, elegirán si tomarlo amargo, dulce, muy caliente, tereré, con cáscara de naranja, con yuyos, con un chorrito de limón.
Cuando conocés a alguien por primera vez, te tomás unos mates.
La gente pregunta, cuando no hay confianza: "¿Dulce o amargo?". El otro responde: "Como tomes vos".

Los teclados de Argentina tienen las letras llenas de yerba. La yerba es lo único que hay siempre, en todas las casas. Siempre.
Con inflación, con hambre, con militares, con democracia, con cualquiera de nuestras pestes y maldiciones eternas.

Y si un día no hay yerba, un vecino tiene y te da. La yerba no se le niega a nadie.

Éste es el único país del mundo en donde la decisión de dejar de ser un chico y empezar a ser un hombre ocurre un día en particular.

Nada de pantalones largos, circuncisión, universidad o vivir lejos de los padres.
Acá empezamos a ser grandes el día que tenemos la necesidad de tomar por primera vez unos mates, solos.

No es casualidad. No es porque sí. El día que un chico pone la pava al fuego y toma su primer mate sin que haya nadie en casa, en ese minuto, es que ha descubierto que tiene alma.

O está muerto de miedo, o está muerto de amor, o algo: pero no es un día cualquiera.
Ninguno de nosotros nos acordamos del día en que tomamos por primera vez un mate solo. Pero debe haber sido un día importante para cada uno. Por adentro hay revoluciones.


El sencillo mate es nada más y nada menos que una demostración de valores...
Es la solidaridad de bancar esos mates lavados porque la charla es buena. La charla, no el mate.
Es el respeto por los tiempos para hablar y escuchar, vos hablás mientras el otro toma y es la sinceridad para decir:
¡Basta, cambiá la yerba!".
Es el compañerismo hecho momento.
Es la sensibilidad al agua hirviendo.
Es el cariño para preguntar, estúpidamente, "¿está caliente, no?".
Es la modestia de quien ceba el mejor mate.
Es la generosidad de dar hasta el final.
Es la hospitalidad de la invitación.
Es la justicia de uno por uno.
Es la obligación de decir "gracias", al menos una vez al día.
Es la actitud ética, franca y leal de encontrarse sin mayores pretensiones que compartir.

¿Te sentiste incluído?...¿Nos tomamos otro?

Un beso.

(Escrito sobre el mate, fuente: internet)

domingo, 1 de mayo de 2011

MUGUET...DESDE EL ALMA

Hoy, después de tanto tiempo...así empieza la letra de un tango...siempre un tango.

Mis queridos amig@s , no podía dejar pasar este día, sin poner la flor de muguet, esa tradición de Francia, que la he hecho un poquito mía,dicen... que trae suerte y me gusta compartirla con todos vosotr@s , no me ha sido posible venir antes y todavía tardaré un poquito en volver por aqui, pero quiero daros las gracias a tod@s a los que dejáis huella...a veces ...más de una vez, y a los que lo hacéis de puntillas, desde aqui y aunque todavía no os haya devuelto la visita, os mando un beso y un abrazo muy fuerte de todo corazón...y DESDE EL ALMA.

El poeta y filósofo indio, Rabindranat Tagore, acertaba al definir de forma tan gráfica, que la verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido,simplemente quiero decir con eso, que hay un tiempo para todo, un tiempo para aparcar deseos...pero sin abandonar los sueños, tiempo...y falta de tiempo,
gracias por vuestra lucecita que habéis ido dejando aqui un día tras otro, y aún cuando hay momentos en lo que no se puede estar en todas las cosas que uno quisiera, los amig@s siempre están ahi, como la luciérnagas o como las estrellas.

Os dejo este vals...DESDE EL ALMA y todo mi cariño.



SILENCIAMOS DEEZER
Bailan: Gabriel Missé y Guillermina Wilson